Palabras al vuelo

Solo palabras, simples palabras que vuelan, corren, susurran, bailan... Brotan de tu mente, de tus labios o de una pluma que traza cada línea de las letras que forman esa palabra. Todo un mundo de sensaciones que probar, de sabores que descubrir, tan especial que la misma palabra puede, incluso debe, tener un significado propio y distinto para cada individuo.
Todos tenemos nuestro rinconcito desde el que podemos crear uno de estos mundos, solo hace falta encontrarlo, y cuando por fin lleguemos a él tirar la llave de su puerta bien lejos para no poder volverlo a cerrar nunca, ya que es una gran tesoro que nos hace ser lo que somos, es una puerta al mundo real desde distintas visiones, en él hay una ventanita que nos permite atisbar todo lo que ocurre a nuestro alrededor y todo lo que ocurre en nuestro interior y desde esta ventanita podemos descubrir que llueve, que truena o que hay un maravilloso día de sol...
Quizás a veces solo serán nuestras esas palabras que nacen de nuestro rinconcito, otras veces de unos pocos afortunados y otras de todas aquellas personas que quieran descubrirlas. Sin embargo serán tuyas para siempre porque con ellas se va un pedacito de ti, con ellas apareces tu cogido de la mano.
Las palabras muestran lo que somos y porque lo somos. Las palabras vuelan por cada resquicio de la cabeza, los oídos y el corazón.